Cuidados del gato Sphynx

Esta raza no se debe criar, ni debe vivir en jaulas o criaderos masivos, ya que necesitan mucha atención tanto las hembras, los machos y los que más los cachorros que habitualmente necesitan ayuda para salir adelante. Es una raza muy cariñosa, dependiente de su dueño y familia de este.

El Sphynx es un gato que puede parecer frágil por su ausencia de pelo y su ligera delgadez, pero en realidad se trata de ejemplares sanos y robustos, necesita los cuidados normales como cualquier gato.

Parásitos: desparasitación con drontal plus o similar cada tres meses.

Uñas: como todos los gatos hay que cortar las uñas todas las semanas y poner a su disposición uno o dos rascadores para eliminar las descamaciones y redondear el filo. Pon las patas delanteras del gato y enséñalo que puede usarlo para afilar sus garras y así dejar su olor en el rascador (tiene una glándula en las patas).

Pelo: al carecer de pelo no necesitan ni peinados, ni malta para las bolas de pelo, solo requiere caricias.

Desparasitación externa: carecen de parásitos externos por lo que no es necesario antiparásitos externo, si sale al exterior pueden cogerlos pero se ven fácilmente y la mayoría de las veces ellos mismos se los quitan.

Frió: no tenerlo expuesto a temperaturas demasiado bajas ya que al no tener pelo no puede protegerse del frío, aún teniendo una capa abundante de grasa, solo retienen el calor acumulado, eso si por tiempo limitado. Después buscarán una fuente de calor para reponer las calorías perdidas.

Calor: estos gatos adoran cualquier fuente de calor, son capaces de quedarse dormidos encima de una estufa o un radiador (ojo se pueden quemar) también les encanta cualquier mascota o persona que le de temperatura.

Sol: ellos antes de quemarse se van a la sombra, si no están acostumbrados al sol estar pendientes.

Heridas: conviene sanar y vigilar la herida con mas frecuencia que las otras especies dado que se verán fácilmente las cicatrices (consejo por estética). 

Alimento: el Sphynx es un gato que gasta más calorías que ningún otro, la alimentación debe ser de gama alta y en época de cría reforzada con latas de alimento húmedo también de gama alta, es importante pienso seco como base fundamental de la alimentación de un Sphynx desde el mes y medio de vida. No es bueno cambiar de marca, puede causar diarreas. Los adultos comerán de kilo y medio a dos kilos al mes. Los problemas con piensos de gama baja a la larga salen caros a la salud de nuestro gato y al bolsillo. Cuando la gata está gestante o lactante esas cantidades se pueden duplicar.

Ojos: limpiarlos siempre que tenga alguna legaña, al igual que nosotros el suele lavarse la cara con su saliva, pero a veces queda alguna.

Orejas: al no disponer de pelo segrega más cera, retirar de vez en cuando el exceso con un bastoncillo pero con cuidado, son muy sensibles sus orejas y pueden dañar el tímpano si se mete muy dentro.

Dientes: hay que vigilar bien la dentadura y si hay exceso de sarro recurrir a una limpieza de boca en una clínica veterinaria.

Arena: esta debe limpiarse al menos de dos veces al día, al sphynx le gusta que esté limpia. En el mercado podemos encontrar muchos tipos, son muy cómodas las arenas absorbentes aglomerantes, procurar que no contengan la menor cantidad de polvo posible, solo hay que retirar las bolas de arena y las caquitas envueltas en arena, el resto no se cambia solo hay que agregar para mantener unos 4 o 5 cm. en la bandeja. ¡Ah! no se os olvide mantener bien retirada la arena de agua y comida (a nadie le gusta comer y beber cerca del WC).

En cualquier caso, debemos recordar que nuestro gato depende totalmente de nosotros, es nuestra responsabilidad cuidar de su bienestar proporcionándole el alimento apropiado. Una buena alimentación repercutirá positivamente en la propia salud del animal y se reflejará tanto en su aspecto como en su carácter.